Es tanto así, que algunos siguen pensando que no ingerirlo es una forma de “ahorrar” calorías” para perder peso con más facilidad. No obstante, lejos de esto, saltarse el desayuno incide en el sobrepeso y otros problemas que reducen la calidad de vida.

En este sentido, es necesario empezar a deslastrarnos de esta erróneas creencias y empezar a ver el desayuno como un hábito diario saludable, y granatizar, además, que sea de buena calidad para que el cuerpo pueda nutrirse de forma correcta tras 8 horas de ayuno.

Pero, ¿realmente sabemos que le ocurre a nuestro organismo cuando tomamos la mala decisión de no desayuna?

1 Te sientes sin energía

Cuando no desayunamos, no recargamos el cuerpo de energía. Por eso, una de las consecuencias de no desayunar es una fuerte sensación de cansancio y somnolencia que se puede prolongar a lo largo de la jornada.

Pero ojo, no se vale reemplazarlo con un simple mate o café con galletas.

Si el principal objetivo s proporcionarle “Combustible” a nuestro cuerpo, es indispensable que esté compuesto por una combinación adecuada de nutrientes esenciales: proteínas, carbohidratos y grasas.

2 Aumenta los niveles de glucosa

Diabetes y niveles de glucosa

Los nutrientes que se obtienen de los alimentos del desayuno son determinantes en el control de los niveles de glucosa.

En este sentido, el cuerpo cuando no recibe los alimentos a tiempo la concentración de insulina disminuye y el cuerpo acumula más azúcar, como una forma de autodefensa en futuras situaciones donde el ayuno se prolonga.

Este es uno de los problema más alarmantes, sobre todo para quienes tienen factores de riesgo de diabetes. Lo que incide en otros síntomas y afecciones con el paso del tiempo.

3 Aumenta la ansiedad

Lejos de ahorrar caloría y bajar de peso, saltarse el desayuno aumenta la sensación de hambre y la ansiedad.

Esto conlleva que cuando nos disponemos a comer exageremos en porciones y posteriormente sintamos el deseo insaciable de picar entre comidas. Lo que ocasiona un efecto contrario a lo que se está buscando.

4 Altera las emociones

La falta de nutrientes que se produce por pasar por alto esta primera comida del día puede incidir en los descontroles emocionales.

Los alimentos de buena calidad contienen sustancias que intervienen en el bienestar hormonal, y en el sano funcionamiento de la tiroides, un desayuno pobre es detonante del aumento de la hormona cortisol, detonante de estrés e irritabilidad.

Por eso, si en los últimos días estas emociones están interviniendo en el trabajo o la vida familiar, es conveniente revisar la dieta. Además, resulta apropiado incluir en el desayuno aquellos alimentos que estimulan la serotonina: chocolate amargo, banana, aguacate, entre otros.

5 Baja las defensas

Cuando no estamos nutridos de forma correcta, nuestro sistema inmunitario entra en una situación de vulnerabilidad.

Por esta razón, pasar por alto esta comida, considerada la más importante del día, puede causar un debilitamiento de sus funciones, haciendo el organismo más susceptible a los virus e infecciones.

6 Problemas digestivos

Remedios para tratar problemas digestivos

Las digestiones lentas y el estreñimiento son otras consecuencias de no desayunar. Aunque hay muchos factores que pueden influir en su desarrollo, la falta de nutrientes que se da por no comer este plato principal puede ser su detonante.

Es primordial que en el desayuno se incluyan fuentes de fibra dietética, ácidos grasos y agua. Esta combinación permite regular las funciones intestinales y favorece la expulsión de los desechos del cuerpo. Adicionalmente, regula el pH de la flora bacteriana y reduce el riesgo de gastritis e indigestiones.

7 Se eleva el riesgo de problemas cardíacos

Los hombres que no desayunan tienen hasta un 27% más de probabilidad de sufrir un ataque cardíaco o enfermedades coronarias graves, tal y como lo reseña un estudio realizado por la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harverd.

Lo que puede conducir al desarrollo de diabetes, obesidad, colesterol alto e hipertensión. Todos estos factores inciden de forma directa en los riesgos para el corazón y la salud cerebral. Sin embargo, los investigadores aseguraron que tomar un desayuno diario puede servir como hábito preventivo.

¿Por qué debemos desayunar?

Según la experta en nutrición deportiva, Sascha Barboza el desayuno es la comida que predispone el comportamiento alimenticio durante el resto del día. Es sencillo, quienes comen poco en la mañana comen mucho en la noche, sobre todo carbohidratos.

Mientras que quienes desayunan una comida completa tienen más energía y menos apetito durante el día, lo que protege en mayor grado la masa muscular.

Además de esto, el desayuno ayuda a regular las hormonas que controlan el apetito, que son la leptina y la grelina, lo que resulta ideal cuando la meta es estar en forma.

7 desayunos para a semana 

¿Cuánto se debe esperar para desayunar?

Barboza explica que luego de abrir los ojos, no debemos esperar más de 45 minutos para desayunar con el objetivo de restablecer los niveles de azúcar en sangre para poder funcionar bien durante el día y evitar los colapsos por hipoglucemia.