Expensas
Afirmaba mi abuelita; “la mano en la lata” es una práctica que viene de muy lejos…Claro, que se acentúa cuando no existen valores morales, ni rendición de cuentas, ni controles institucionales convenientes.
Y sí! han pasado muchos años donde las Administraciones de Edificios hicieron y deshicieron a gusto a piacere…Arrastrando a su paso, una sumatoria de inequidades, sin solucionar los inconvenientes reales de fondo. Naturalmente que, hay excepciones…como en todo…porque las generalizaciones no asisten a la busca de soluciones…
Quien no recuerda los incrementos cada treinta días, el detalle de gastos por reparaciones que no se efectuaron. Y si se hicieron, a un costo en tantas ocasiones mayor…Está claro que estas estructuras asimismo se hallan ligadas a los encargados. Actividad que en los últimos tiempos adquirió potestades increíbles, con más derechos que deberes y sueldos que cotizan en euros…
“Y de qué manera tanta alegría seguida puede hacer mal” cantan los “Auténticos Decadentes” …Con la meta de trasparentar las liquidaciones, desde noviembre, va a entrar en vigencia el Programa “Mis Expensas” establecido por el Gobierno porteño. Los vecinos que vivan en edificios con consorcios, van a recibir por e mail el resumen por medio de un formulario común con toda la información detallada. (Va a ser optativa la copia en papel).
Las Administraciones deben cumplir con la normativa y además de esto, deberán mandar el recibo de pago al lado de los comprobantes de gastos que haya hecho el consorcio, caso de que algún vecino los reclame.
Otro de los primordiales reclamos de los vecinos es la carencia de inscripción de los administradores en el Registro. Las demandas se pueden hacer en todas y cada una de las sedes Comunales. Menos en la ocho y la diez, para lo que va a haber que pedir turno. Para mayor información, comunicarse a la línea gratis ciento cuarenta y siete de la Urbe o ingresar a la Página www.buenosaires.gob.ar. Se puede destacar que a instancias de Defensa del Consumidor, se van a abrir espacios de mediación a fin de que inquilinos, dueños, administradores y encargados puedan conversar, superando obstáculos en busca del bien común, el que sin duda, no habrá de estar en discusión.
De nuevo, de cada uno de ellos depende, que este Plan puesto en marcha avance y se consolide.
“Cuentas claras” ni más ni menos que eso!