La leishmaniasis es una nosología parasitaria trasmitida por un mosquito que puede provocar úlceras en la piel y que asimismo se conoce como la enfermedad come-carne. Cerca del noventa por ciento de los casos ocurren en Bolivia, Brasil, Perú y Ecuador, donde muchos enfermos acaban con desfiguraciones en su piel como consecuencia de la infección.

Mas ahora, estudiosos brasileiros han encontrado una vacuna contra esta enfermedad. Ha sido probada en ratones con resultados bastante prometedores. “La vacuna no dejará al parásito reproducirse dentro de las células ni lograr otros órganos”, describe Alexandre Marqués, uno de los estudiosos, que desarrolla su trabajo en la Universidad Federal de Minas Gerais, en el país carioca.

El proceso por el que han logrado el descubrimiento se fundamenta en un hidrato de carbono presente en la superficie de la Leishmania. Generalmente, dicho hidrato de carbono desencadena una contestación inmune deficiente para pelear contra el parásito.

Para progresar la contestación del organismo en frente de dicho hidrato de carbono, los estudiosos lo introdujeron en la superficie de un ‘virus falso’. Cuando lo introdujeron en el organismo, dicho ‘virus’ desencadenó una contestación inmune suficiente para ‘entrenar’ al organismo en frente de la Leishmania.

Por último, verificaron que, ciertamente, la vacuna había surtido efecto. Procuraron inficionar a los animales con la Leishmania, mas estos se mostraron resistentes. En consecuencia, se abre la posibilidad de que por último se pueda vacunar a humanos contra esta horrible enfermedad. Los resultados han sido publicado en la gaceta ACS Central Science.