Los Funcionarios del Ministerio de Cultura acordaron con las Cámaras empresariales, sindicatos y sectores relacionados al rubro del cine, la aprobación de un Protocolo general para la reapertura de las salas de cine en la Ciudad de Buenos Aires, luego de diez meses de inactividad por la pandemia del coronavirus.

El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires deberá solicitar su respectiva autorización ante la Jefatura de Gabinete de la Nación, como lo hicieron las demás Jurisdicciones del país.

El protocolo acordado incluye ciertas medidas sanitarias similares a las aperturas de las salas de teatro, un cupo máximo de espectadores que no supere el 50% la capacidad de cada sala, la asistencia de hasta seis personas por grupo familiar denominadas “burbujas sociales de recreación”, y el distanciamiento social de dos metros entre los visitantes para dejar una butaca libre entre los presentes.

El publico deberá permanecer con el tapabocas puesto y sólo podrá sacárselo para ingerir alimentos. En tanto, cada sala será satinizada entre cada función, y se abrirán las puertas diez minutos antes que termine la película. Todos los cines deberán contar con un adecuado sistema de ventilación, al igual que en los teatros, que puede ser natural y/o mediante un sistema de aire acondicionado central con 100% TAE (toma de aire exterior).

Además habrá estaciones satinizantes al ingreso a las salas, y se les tomará la temperatura corporal a todos los asistentes. Cada complejo Cinematográfico deberá establecer un cronograma especial en sus programaciones para evitar las aglomeraciones del público, y los tickets de entradas deberán ser adquiridos con antelación a través de medios digitales o telefónicos.

Por último, una vez ubicado cada espectador en su respectiva butaca asignada, no se le permitirá el desplazamiento durante la proyección de la película, con excepción del uso del sanitario.  En las provincias de  Córdoba, Chubut, Jujuy, Entre Ríos, Santiago del Estero y Mendoza, ya hay salas de cines funcionando desde el mes de  Diciembre del pasado año.

Los cines de la Ciudad de Buenos Aires,  que permanecieron cerrados desde el comienzo de la pandemia, esperan en estas semanas reabrir sus puertas bajo el cumplimiento  de las estrictas medidas del protocolo recientemente aprobado.  Las cadenas de cines porteños ya han actualizado y capacitado a sus empleados para afrontar estas nuevas exigencias, y estiman que la vuelta del público será lenta y dependerá de la evolución epidemiológica de los contagios en la Ciudad.