Alrededor del setenta por ciento de los productos envasados que hallamos en el súper poseen azúcar, si bien nuestra tendencia a consumir cierto género de productos nos hacen no arreglar en ellos. Aunque este no es dañino en pequeñas cantidades, la mayor parte de nosotros consumimos considerablemente más de las cantidades recomendadas. La OMS (OMS) aconsejó últimamente no exceder los veinticinco gramos diarios (6 cucharaditas) mas no debes sujetarte a esta cantidad como un clavo ardiendo, puesto que una gran parte de los productos que consumes como pastas, frutas, jugos o bien el alcohol se convierten en azúcar al entrar en nuestro organismo.El azúcar es como una droga

Últimamente, la neurocientífica Nicole Avena explicó en un vídeo efectuado para TEDEd los daños colaterales de la sacarosa en nuestro cerebro. Cuando ingerimos azúcar, la corteza cerebral activa los receptores del sistema de recompensas, lo que alienta a comer todavía más azúcar como consecuencia del falso sentimiento agradable que experimentamos. Esto es debido a la liberación y incremento de los niveles de dopamina, que altera la química natural de nuestro cerebro y nos alienta a continuar consumiendo cada vez más y más.Esto no desea decir que debamos suprimir el azúcar por completo de nuestra dieta, mas sí que seamos siendo conscientes de los productos que consumimos. Ciertos de ellos poseen azúcares naturales que nuestro metabolismo puede digerir con mayor sencillez, como es el caso de las frutas, la miel, vegetales, lácteos o bien melaza de arroz o bien otros cereales. La lista de productos sanos que poseen fructosa y glucosa naturales son elevados y tu organismo te lo agradecerá.

Las huellas del azúcar en tu cerebro
Consumir en ocasiones un trozo de chocolate es inofensivo y agradable, mas cuando ponemos a todo ritmo el sistema de recompensas con demasiada frecuencia los efectos son muy negativos. Conforme la doctora Avena te hace perder el autocontrol, el deseo y además de esto, tu cuerpo se amolda a este alto consumo, lo que puede dar sitio a enfermedades que con toda seguridad no desees padecer como diabetes, depresión, ansiedad, pérdida de memoria, deterioro cognitivo o bien demencia como un mayor peligro de sufrir Alzheimer. Vamos, que se crea un círculo vicioso de intensa ansiedad y enormemente perjudicial tanto en adultos como en pequeños.

La OMS aconseja no exceder los el cinco por ciento de la energía ingerida desde azúcares libres (los que no están presentes de forma natural en el comestible y han sido añadidos en su producción). Pese a estas recomendaciones y conforme recoge la Coalición por el Control del Azúcar, su consumo ha aumentado un veinte por ciento en los últimos años: “La contestación a esta aparente paradoja es simple: el azúcar ha desaparecido de nuestra vista, mas no de nuestra dieta. El día de hoy más del setenta y cinco por ciento del azúcar que ingerimos nos llega incorporado en comestibles elaborados donde no lo vemos ni reconocemos.”

Si tras estas indicaciones decides tomarte de verdad tu salud y supervisar los azúcares que introduces a tu apreciado organismo, puedes preguntar las recomendaciones de la OMS y de la Coalición por el Control del Azúcar. No solo ganases la batalla a la obesidad, sino asimismo vas a ser dueño de un cerebro considerablemente más sano.