“Rememorar” un corazón y hacerlo palpitar nuevamente. Semeja un milagro, mas es ya posible merced a una nueva tecnología desarrollada por la compañía Transmedic. Frecuentemente, para poder efectuar un trasplante de este órgano, había que conseguirlo cuando el donante era declarado en estado de muerte cerebral; la extracción había que realiarla lo más veloz posible, para eludir daños irreversibles ocasionados por la carencia de oxígeno, y el corazón había de ser preservado a temperaturas en negativo.

Mas, con este nuevo procedimiento, el corazón es conectado a un sistema que le aporta oxígeno y nutrientes provenientes de la sangre del propio donante. De esta manera, el órgano no deja de marchar hasta llegar a la mesa de operaciones para ser trasplantado. Si bien, lo verdaderamente revolucionario es que el sistema deja rememorar el corazón del paciente si bien se halle en estado de muerte circulatoria. O bien, lo que es exactamente lo mismo, es capaz de recobrar el corazón de un paciente al que se le ha parado. En un caso específico, los médicos consiguieron que un corazón que estuvo 2 minutos parado hasta el momento en que comenzaron la extracción; tras veinte minutos lo unieron al dispositivo y comenzaron a bombear oxígeno y electrolitos. El corazón volvió a palpitar y pudo ser trasplantado.

Esta técnica se probó por vez primera de forma exitosa en el mes de octubre de dos mil catorce, y ya ha sido usada de manera exitosa en 15 trasplantes efectuados en R. Unido y Australia, y los especialistas calculan que puede acrecentar entre un quince y un treinta por ciento la cantidad de órganos libres para donaciones. A pesar de todo esto, no ha faltado la polémica, puesto que muchos médicos se han cuestionado que los pacientes estén verdaderamente fallecidos si su corazón puede ser revivido.