El pasado 12 de Julio un desperfecto técnico dejo sin uso al único tomógrafo, que tenía más de once años de utilidad  en el Hospital Pedro Elizalde, de la Avenida Montes de Oca al 40.  Esta rotura generó que más de 40 chicos fueran derivados a cirugías en otros Hospitales de la Ciudad.

El Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires informó que durante el mes de Agosto, se adjudicará el tomógrafo con un presupuesto oficial de $19.473.000, mientras tanto cada paciente seguirá siendo derivado a los diferentes centros de salud de la Ciudad de Buenos Aires.

La utilidad de un tomógrafo en un Hospital es fundamental,  y consiste en el proceso de producción de imágenes por secciones, la imagen producida es llamada tomograma.

La tomografía computarizada de la cabeza ayuda a prevenir lesiones, dolores severos y síntomas de aneurismas, sangrado, derrame cerebral o tumores. La tomografía de abdomen y pelvis, ayuda a detectar patologías del intestino delgado, colon y órganos internos. En todos los casos la utilización para su exploración por medio de un tomógrafo es indolora, no invasiva, altamente precisa y rápida.

En la mayoría de los casos se pueden detectar lesiones o hemorragias lo suficientemente a tiempo como para salvar vidas.  El tomógrafo consiste en un mesa, donde un motor mueve al paciente mediante una apertura circular en el sistema de imagen, una fuente de rayos X va girando en el interior y pasando por diferente partes del cuerpo del paciente. La cantidad de rayos X absorbidos colabora en la dosis de radiación al paciente, y la cantidad de rayos que llegan a la película son los que generan la imagen.

La falta de este instrumental, afectó la actividad de cuidados intensivos, neurocirugía, cirugía cardiovascular, ortopedia, traumatología, cirugía general, pediatría y oncología, para tratar sus patologías en urgencias o en turnos programados.

La compra de este nuevo tomógrafo de última tecnología, permitirá una mejor calidad de imágenes, más rápidas y precisas, además ayudará a la menor exposición de radiación a los niños y al personal técnico. El antiguo tomógrafo disponía de una tecnología obsoleta, el equipo contaba con tan sólo dos filas, y según los profesionales del Hospital se necesita un tomógrafo de 64 filas, que facilitará que los estudios sean más dinámicos y en 3D, y que reducirá también la necesidad de realizar los estudios de resonancia magnética.

El Ministerio de Salud porteño adjudicó a la empresa PHILIPS ARGENTINA S.A. la  instalación de éste nuevo tomógrafo, que recién estará en uso a mediados del mes de Diciembre.