En el Jardín Japonés,  se realizará una jornada cultural sobre las seis artes marciales japonesas. Contará con la participación de la Embajada de Japón en Argentina, he incluirá una muestra fotográfica, prácticas en vivo y transmisión vía streaming por las redes sociales.

El evento se llevará a cabo en el Jardín Japonés, ubicado en la Avenida Casares 3450, en el barrio de Palermo, del 26 al Febrero al 28 de Marzo. Las disciplinas marciales japonesas son Karate, Sumo, Aikido, Judo, Kendo y Kyudo. El sábado 27 de Febrero, de 15:30 a 17:30 se hará una demostración en vivo de Karate-Do, a cargo de los integrantes del  Dojo Ken,  y el domingo 28  habrá una práctica de Sumo, coordinada por la Asociación de Sumo en Argentina.

El sábado 13 y 27 de Marzo, se realizarán vía online presentaciones de Kyudo y de Kendo, a través de las redes sociales del Jardín Japonés (facebook.com/jardinjapones -Instagram@jardinjapones). El 27 de Marzo, los profesores Federación Aikikai Argentina, mostrarán en vivo algunas de las técnicas básicas de Aikido, y la Escuela de Judo San francisco lo harán el 28 de Marzo de 15:45 a 17:30hs.

La entrada general al Jardín cuesta $290, los menores de 12 años y los jubilados entran gratis.

Por otra parte, el predio dispone de talleres y cursos,  que enseñan sobre métodos reflexológicos,  para liberar tensiones y sentimientos tóxicos, en este momento de la pandemia del Covid-19. Se trata de la técnica de reflexología, considerada por los profesionales de la salud, como un excelente complemento para cualquier tratamiento médico, que incluyen enfermedades digestivas,  y respiratorias, ya que dicha técnica ayuda a restablecer la armonía de los órganos, liberando los desechos tóxicos que circulan en nuestra sangre.

Además se brindan talleres de Origami (técnica japonesa para realizar figuras con hojas de papel), Reiki (terapia energética), Ikebana (arte de arreglo floral), pintura japonesa, comida tradicional de Japón,  Concursos de  “Anime y  Manga Taikai”.

El Jardín Japonés fue inaugurado el 17 de Mayo de 1967, diseñado y construido por la colectividad japonesa en Argentina, para luego ser donado por intermedio de la Embajada del Japón a la Municipalidad de Buenos Aires, en reconocimiento al pueblo argentino por ser el país que le abrió sus brazos en tiempos de inmigración.