La celiaquía y la escuela
Ha comenzado un nuevo año escolar, y son muchas las preocupaciones a la hora de empezar la escuela. Desde poder contar con todos los materiales de didácticos de aprendizaje, los uniformes, los libros, hasta planificar la rutina diaria de cada integrante de la familia.
Pero en el caso de los niños celíacos, los padres tienen una preocupación extra: Asegurarse de que sus hijos tengan una buena alimentación en la escuela, que sea beneficiosa de nutrientes y que cuente con las medidas de seguridad e higiene para que la comida de su hijo, no sufra de contaminación cruzada que le pueda causar alergias y atentar contra su salud.
Día a día se va teniendo mayor conocimiento sobre ésta enfermedad, que no siempre es muy fácil de diagnosticar, ya que sus síntomas pueden ser muy variados, así como también la forma de manifestarse.
La celiaquía es una intolerancia a la proteína del gluten. Es una reacción inmunológica del organismo ante la ingesta de gluten. El gluten es una proteína presente en el trigo, la avena, la cebada y el centeno. Es por eso que los productos aptos para celíacos, contienen la leyenda Sin TACC. Sin Trigo, Avena, Cebada o Centeno. O también se puede encontrar la leyenda, gluten FREE, que adoptamos del idioma inglés y que significa libre de gluten.
Es importante tener en cuenta, que hoy en día en el mercado, se ofrecen cada vez más variedad de productos aptos. Pero algo que no siempre se tiene en cuenta, la mayor parte de las veces por desconocimiento, es la contaminación con gluten, que pueden sufrir estos productos, si se colocan en los mismos platos, se usan los mismos cubiertos, o hasta se tocan con las manos productos con gluten, como por ejemplo el pan, y sin lavarse las manos, se manipulan productos aptos.
Estos cuidados son de suma importancia, ya que una mínima contaminación, puede traer grandes consecuencias.
Por eso es importante, que todos sepan y comprendan lo que la celiaquía implica, ya sea los maestros, los amigos o compañeros de escuela y las familias.
Es importante que el niño celíaco se sienta integrado. Es de suma importancia que en el comedor de la institución, si la misma posee uno, en las excursiones escolares, o fiestas y reuniones, haya un menú apto para el celíaco.
Para que esto sea viable, es vital, que los cocineros, o encargados de preparar los alimentos, estén familiarizados con las medidas de contaminación, para así prevenirlas y poder brindar un menú seguro.
Otro punto importante, es chequear la materia prima con la que se trabaja, ya que muchas veces se desconoce que muchos productos, como embutidos, fiambres o quesos, pueden contener gluten, ya que para su fabricación se utilizan harinas o espesantes que pueden ser nocivos.
Y por último, otro dato importante para los padres, que muchas veces se pasa por alto, es controlar los ingredientes de los materiales escolares con los que sus hijos van a trabajar durante el año y verificar que los mismos no sean nocivos para su salud.
Es importante remarcar que la única cura para la enfermedad celíaca es realizar una dieta sin gluten estricta de por vida. Y realizando esta dieta, podemos reforzar el concepto de que en realidad la celiaquía se trata de personas sanas, que deben comer de forma diferente.