Las cámaras de seguridad que pertenecen a privados se incorporarán a la red pública de vigilancia porteña.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, anunció la firma de convenios de colaboración, con bancos, empresas, laboratorios, supermercados, cadenas de hoteles, entre otros, para la incorporación de sus cámaras de seguridad que apuntan a la vía pública, a la red de video-vigilancia de la ciudad, que ya cuenta con un total de 15.000 dispositivos estratégicamente distribuidos, que cubren el 75% del territorio porteño.
Todas las cámaras de video son controladas por los Centros de Monitoreo Urbano (CMU), el Centro de Monitoreo de Chacarita, ubicado frente al cementerio, en Av. Jorge Newbery 4218, Centro de Monitoreo de la Av. 9 de Julio 590, y el Centro de Monitoreo de Puerto Madero, situado en la intersección de la Av. Macacha Güemes y Juana M. Gorriti.
La incorporación de cámaras de seguridad privadas al sistema de vigilancia de la ciudad, se llevará a cabo bajo tres condiciones excluyentes. La primera, sólo se pueden anexar aquellas cámaras que apunten hacia la vía publica, no hacia el interior de las propiedades.
En todos los casos, será necesario firmar un convenio en conjunto con el Gobierno porteño, sobre el uso compulsivo de las imágenes, excepto por orden de la justicia. La última condición, establece que las cámaras privadas no estarán siempre on-line como las de la red pública, sino que se podrán activar a pedido de los Centros de Monitoreo Urbano, para alguna investigación judicial.
Para este año, el objetivo del Gobierno de la Ciudad, es sumar 1.000 cámaras de empresas privadas, y se tiene previsto a futuro, añadir las cámaras de edificios y viviendas, en común acuerdo con los consorcios y sus propietarios.
El incremento de las cámaras de video-vigilancia en la Ciudad de Buenos Aires, constituye el factor principal para la prevención y lucha contra el delito. El sistema de vigilancia pública, facilita la detección rápida de actitudes sospechosas, el veloz accionar de la policía, y para aportar pruebas esenciales en las investigaciones de la Justicia.
Por otro, el análisis forense de las imágenes a través de las cámaras de seguridad, permite la búsqueda de objetos, personas, y vehículos, mediante filtros de acuerdo al color, morfología, sentido de circulación y rango temporal. En tanto, el Ministerio de Justicia y Seguridad de la ciudad, dispone de una Biblioteca Digital, destinada a aportar las imágenes archivadas de las 15.000 cámaras, en tan solo 24 horas.