Misa en la Catedral Metropolitana por el 40º aniversario del Tratado de Paz entre Argentina y Chile
Funcionarios nacionales, porteños y chilenos participaron de una emotiva ceremonia en homenaje al pacto histórico firmado bajo la mediación del Papa San Juan Pablo II.
Este miércoles 6 de noviembre, la Catedral Metropolitana de Buenos Aires fue escenario de una misa especial para conmemorar los 40 años del Tratado de Paz entre Argentina y Chile, un acuerdo clave firmado el 29 de noviembre de 1984 bajo la mediación del Papa San Juan Pablo II. La ceremonia reunió a funcionarios del gobierno porteño, del Gobierno Nacional y representantes del gobierno chileno, en un acto de reflexión y agradecimiento por la paz alcanzada entre ambos países.
El Tratado de Paz, que resolvió disputas territoriales históricas, especialmente en la región austral y el canal de Beagle, fue crucial para poner fin a años de tensiones entre Argentina y Chile. Su firma marcó un hito en la diplomacia de ambos países, estableciendo relaciones de paz y cooperación que perduran hasta el día de hoy.
Monseñor Oscar Ojea, presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, presidió la misa, destacando la trascendencia de este acuerdo en el contexto de la historia de las relaciones bilaterales. Durante su intervención, Fulvio Pompeo, Secretario General de la Ciudad de Buenos Aires, subrayó la relevancia de este aniversario, indicando que “marcó un nuevo camino en las relaciones bilaterales y reafirma nuestro compromiso con la paz y la cooperación”.
La Directora General de Cultos de la Ciudad, Pilar Bosca, también estuvo presente y remarcó que la misa fue una oportunidad para “agradecer por el don de la paz, la cual se logró gracias al trabajo conjunto de ambos países y a la mediación de la Iglesia Católica”, reconociendo el rol fundamental de la Iglesia en el proceso de reconciliación.
Por el lado del Gobierno Nacional, asistieron la Vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel; el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos; el Canciller, Gerardo Werrthein; y el Secretario de Culto y Civilización de la Nación, Nahuel Sotelo, entre otros funcionarios. En representación del gobierno chileno, participó el embajador de Chile en Argentina, José Antonio Viera-Gallo, acompañado por una comitiva de su país.
La misa no solo fue un acto conmemorativo, sino también una muestra de la importancia de la diplomacia, la cooperación y el compromiso con la paz en un contexto internacional que sigue valorando estos principios.