Se confirmó el primer caso de la viruela del mono en un niño de la ciudad.
El Ministerio de Salud de la Nación, confirmó el primer caso pediátrico de la viruela del mono en un niño de 10 años residente en la Ciudad de Buenos Aires. Se trata de la primera internación pediátrica en terapia intensiva de un niño con esta enfermedad.
Desde la aparición de la gripe del mono (virus Monkeypox) en nuestro país, los afectados por esta enfermedad tenían un promedio de edad de 35 años. Los casos en la Argentina siguen creciendo, y más del 70% de los pacientes son de la Ciudad de Buenos Aires.
El último Boletín Epidemiológico registró un total de 221 casos en el Distrito porteño, 52 en la Provincia de Buenos Aires, 2 en la Provincia de Santa Fe, 2 en Rio Negro, 1 en Corrientes, 1 en Mendoza, 1 en Neuquén y 1 en Salta. El 99,5% de los casos corresponde a personas del sexo masculino, no hay fallecidos ni casos de carácter grave.
Los casos se dieron en una franja etaria que va desde los 18 a los 61 años, con una edad promedio de 35 años. Ahora se produjo el primer afectado por el virus en un niño de 10 años, que presentó síntomas de fiebre mayor a 38 grados y erupciones en los brazos. Según expresaron los infectólogos, se trata de un caso confirmado de contagio intrafamiliar, ya que el menor tiene antecedentes epidemiológicos de un contacto estrecho, con un familiar que tuvo la infección.
La Doctora Viviana Leiro, Jefa del Servicio de Dermatología de Hospital Muñiz, recalcó la necesidad de que la población tenga en cuenta las recomendaciones para prevenir el virus del mono. Si una persona manifiesta algún síntoma debe asistir a la consulta médica, y evitar el contacto por la piel con otras personas. Si un niño tiene síntomas, deberá acudir al médico con barbijo, y luego cumplir con los 21 días de aislamiento, hasta que se le caigan las costras producidas por la lesiones en la piel. Hasta el momento, el niño de 10 años con viruela del mono, residente en la Ciudad de Buenos Aires, es el paciente con menor edad de la Argentina.
Históricamente, el virus se ha propagado a través del contacto directo con lesiones, fluidos corporales, gotitas respiratorias y a veces, a través de la contaminación indirecta por superficies como la ropa de cama compartida. Pero en este brote, hay evidencia preliminar de que la transmisión sexual puede desempeñar un papel importante, ya que el brote mundial del virus del mono actual, afecta mayoritariamente a hombres homosexuales y bisexuales.
El virus provoca lesiones cutáneas dolorosas y síntomas similares a los de la gripe común. La mayoría de las personas infectadas se recuperan por completo, pero la enfermedad puede causar complicaciones graves, como infecciones bacterianas, inflamación del cerebro, y hasta la muerte.